Para lograr la paz y la serenidad interior, son importantes los lugares solamente si su vibración se cuida: si se hacen los trabajos, las prácticas para que en ellos haya mucha conciencia y se sienta y perciba esa vibración, se sienta que existe algo más, se encuentre paz, armonía, unidad.
La experiencia de la Vida es hermosa.
¿Cómo está la familia cuando alguien nace? ¡Feliz! ¡Pero el bebé llora! ¿Por qué, si está toda la familia feliz, llora el bebé? Porque su alma dice: “otra vez me toca aprender cosas, voy a pasar por tantas circunstancias…”.
Y luego pasa al revés: cuando un Ser ha logrado cumplir su misión ¡se va
feliz!
¿Y quiénes son los que lloran? Los que nos quedamos aquí diciendo: “se nos va un alma grande, que cumplió su misión, que logró transformarnos a tantas personas, que logró tanto para tantas almas y su evolución…”
¡Es tan importante poder ser parte del despertar de las almas!
Eso me permite a mí cumplir mi Misión para irme sonriendo de aquí. Porque si me voy llorando significa que hay que volver, no cumplí mi misión, no completé lo que mi alma venía a hacer. A veces nuestro tiempo lo utilizamos en tantas otras cosas que nos parecen tan importantes… y al final, no nos hacen reír para irnos de aquí.
“Yo di todo lo que yo soy. Yo hice todo lo que pude, no me quedé con nada para mí”. Un Alma Grande es aquella que piensa siempre primero en los demás, en la naturaleza, en las almas.
Venimos a la vida llorando, a un mundo donde existen muchas energías, que en ocasiones no son armoniosas y afectan a nuestro sistema nervioso. Tenemos una actividad mental terrible, pensamientos que son -a veces- muy negativos, muy densos; miedos, emociones que van deteriorando nuestro sistema nervioso. Pero éste puede restablecerse si no ha habido afecciones o enfermedades graves.
Hay que bajar las revoluciones mentales y emocionales hacia la Serenidad y la Ecuanimidad.
Tendemos a rechazar los ambientes bulliciosos o en desarmonía. O podemos decir: “Yo, en la serenidad interior, puedo estar en cualquier lugar si estoy atenta, presente y consciente”. Y aprovechar el lugar para no rechazar, para aceptar… buscar la parte positiva.
La serenidad es importantísima para sobrevivir hoy en día. Si no logramos desarrollarla en nuestro interior y la buscamos en el exterior, no hemos completado nuestro trabajo. Estar en paz, porque el sistema nervioso ha de funcionar correctamente hasta el final de nuestros días.
¿Cómo lograr esa serenidad interna?
Nosotros tenemos las células madre, originales, que contienen información de cómo hemos sido creados, con la perfección del primer instante de nuestra vida; ahí está codificada también la respuesta y la
solución para restablecer la salud y el sistema nervioso.
¿Por qué siempre se ha meditado en los chacras?
En el chacra 1 está la kundalini, que nos puede llevar a la Iluminación, a la recuperación de la armonía, la paz interior, la serenidad que nos devuelve el contacto con todo lo que nos rodea, a todas las facultades que podemos activar.
¿Y no son esas células madre que están en la base de la columna vertebral, las que contienen la vida en potencia y en esencia?
Si meditamos en ese chacra activando la fuerza de vida en nuestro interior, podremos recuperar la salud del sistema nervioso, de nuestro cuerpo emocional, la vitalidad de nuestros órganos y también la paz interior y la serenidad interna.
Irmgard Radefeldt
Presidenta de FIADASEC y Directora Ejecutiva de FIADASEC ante el Consejo Económico
y Social de la ONU (ECOSOC) y del DPI de la ONU. ONG / Estatus consultivo
Artículo escrito para Espacio Humano – Septiembre 2017
www.fiadasec.org o en FB: @DamarleEsencia